La compañía vendió sus operaciones en territorio nacional a la empresa argentina Integra Tec International con una transacción de s./3.7 millones, siendo parte de su plan de retiro masivo de sus filiales en Latinoamérica.
El último domingo 13 de abril, la empresa española de telecomunicaciones Telefónica anunció finalmente la venta de su filial en Perú a la compañía Integra Tec Internacional, una movida que forma parte de su estrategia por centrarse en su salida de la región y desinvertir en casi toda Latinoamérica.
Dicha transacción se realizó por el monto de s./3.7 millones (alrededor de US$1 millón), una operación que resulta ser un precio casi simbólico, pero que concluye con uno de los mayores declives de la española telefónica y su pesada deuda en territorio nacional. En ese sentido, al cierre del año 2024, la deuda de Telefónica en el Perú ascendía a 4.838 millones de soles (1.241 millones de euros), siendo el mayor acreedor la Sunat, con 2.473 millones de soles (634,5 millones de euros).
Telefónica y su inminente cierre en Latinoamérica
Al respecto, la compañía informó mediante un comunicado la oficialización de dicha venta, destacando su punto de quiebre dentro del mercado nacional.
“Telefónica Hispanoamérica, S.A., filial 100% propiedad de Telefónica, ha vendido la totalidad de las acciones que ostenta en Telefónica del Perú (…) a Integra Tec International”, inicia la mención enviada al organismo supervisor de la Bolsa Española.
Posteriormente, Telefónica precisó que el precio de s./3.7 millones (aproximadamente 900 mil euros), se determinó “considerando la situación de Telefónica del Perú”, señala.
Con 31 años en el país, la empresa española venía reportando pérdidas recurrentes, con casa matriz brindados préstamos y mermando su contribución en el Perú, siendo un rumor a voces su salida absoluta.
“Nuestras operaciones en Hispanoamérica eran hasta hace unos años el motor de crecimiento de la compañía. Sin embargo, las condiciones particulares en estos mercados han impactado en la evolución de nuestros negocios, mermando su contribución en los últimos años por distintos motivos (entorno macro y regulatorio, mayor presión competitiva, una escala insuficiente o la volatilidad de las divisas)”, señaló en el 2019, José María Álvarez- Pallete, entonces CEO de Telefónica, quien otorgaba dicha información a los accionistas, en busca de un plan por una sinergia y nuevos inversionistas para evitar su caída.
Tras todos los retos y las condiciones en las que se vio involucrada, tales como nuevas competencias y la pandemia, Telefónica aceleró sus planes y casi 5 años después inició su proceso de venta de filiales de Hispanoamérica, iniciando con Guatemala, Costa Rica y Colombia. Para el mes de febrero, se anunció que sus operaciones en Argentina se encontraban en venta con Telcom Argentina, entre polémicas con el presidente Javier Milei.
Este proceso sigue en pie, y medios españoles señalan que Telefónica también se encuentra evaluando su salida en su filial de Chile; sin embargo, el subsecretario de Telecomunicaciones de Chile, Claudio Araya, reveló una conversación reciente con el CEO de Telefónica Hispam, expresando que “no tenían proyectados en acelerar ventas” en el país del sur.
Un caso que también cobra peso, es en su filial en México, donde, según señala el diario español Cinco Días, la compañía de telefonía, ha contratado al banco de inversión JPMorgan para vender su negocio en dicho territorio.
¿Qué ocurrirá en Perú?
En cuanto al Perú, sumado a su desinversión en Argentina, Colombia, Uruguay y Ecuador, la firma Integra Tec Internacional Inc., Telefónica incluyó dentro de la operación la cesión de créditos financieros en relación.
Otros detalles de la compra, contemplan la continuidad del servicio de sus usuarios en todo Perú (alrededor de 13 millones de personas). A ello se suma otros puntos a destacar, como la solicitud de Procedimiento Concursal Ordinario (PCO) ante Indecopi que busca reestructurar su deuda, así como la transferencia del control indirecto de la operadora Internet para Todos en Perú.
El proceso incluye el de mantener disponible el monto no desembolsado del crédito mercantil por un total de S/1.549 millones, que será ejecutado parcialmente por ambas partes, y que se firmó el 14 de febrero de este año.
Por su parte Integral Tec, asumirá el control operativo, siendo Germán Ranftl el nuevo presidente del directorio y que lidera el proceso de reestructuración.