Luis Quiles, Head de Inteligencia Artificial de NTT DATA, expuso en el CAMP 2025 sobre el cambio de paradigma empresarial, por medio del uso de inteligencia artificial.
En los últimos años, la inteligencia artificial (IA) generativa revoluciona negocios, al funcionar como interfaz, recomendador, integrador y automatizador. Esto ha dado pie a una nueva cadena de valor del marketing, a través de estrategias de personalización y validación.
Por eso, durante el segundo día del Congreso Anual de Marketing Perú – CAMP 2025, Luis Quiles, Head de Inteligencia Artificial de NTT DATA, expuso sobre el cambio de paradigma empresarial, por medio del uso de IA. La ponencia “El futuro del marketing es personal: GenAi Power” reveló insights importantes para mantenerse relevante en una industria tan cambiante, competidora y retadora.
Si bien todos pensaban que la IA generativa iba a facilitar, por ejemplo, la segmentación del mercado, Quiles explica que esto no es del todo preciso, pues tiene cierto condicionamiento. “Para que la IA generativa funcione bien, resulta necesario crear un contexto adecuado para que sea desarrollada de tal manera que las compañías puedan explotar todo su potencial”, detalla.
Esto quiere decir que el marketing debe aprovechar estas nuevas tecnologías incluso para la creación de contenido atractivo que impacte. Por eso, Quiles también sostiene que “la IA generativa puede ser muy creativa, bajo las indicaciones precisas”.
El humano como compañero de la IA
De acuerdo a la ponencia, en el futuro las marcas no van a buscar vender directamente a los clientes, sino, más bien, a los agentes que influyen directamente en la decisión de compra. ¿A qué se refiere Quiles con eso? Hoy en día, en la era de ChatGPT, los consumidores consultan todo a la plataforma, desde cómo empezar a realizar un deporte hasta qué compañías deportivas fabrican el calzado más confiable para practicarlo.

En ese sentido, los agentes de IA se vuelven los nuevos intermediarios en el proceso de compra. Por lo tanto, las empresas tienen que sumar esfuerzos mediante estrategias para persuadir a dichos agentes, potenciando la información de la marca disponible en la red.
Para eso, surge un nuevo paradigma del SEO y redes sociales hacia asistentes inteligentes y agentes de recomendación. De esa manera, pueden construir una gestión activa de la reputación digital, optimizando datos e identificando posibles sesgos.