Restringir a los usuarios llevar sus propios productos a las salas de cine podría constituir una práctica abusiva. Motivo por el cual la institución se ha visto en la obligación de investigar este tipo de situaciones.
El ingreso de alimentos y bebidas a las salas de cine ha sido una práctica que por mucho tiempo los dueños de este tipo de empresas han tratado de evitar a favor de su propio expendio de estos productos. Sin embargo, dichas compañías podrían estar incurriendo en una ilegalidad al poner en práctica estas acciones.
Al respecto, el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi) anunció el monitoreo y seguimiento en el caso de Cinépolis (Operadora Peruana de Cines S.A.C.). Tras conocerse que habría prohibido el ingreso de alimentos y bebidas ajenas a las comercializadas por dicha empresa.
Cláusulas abusivas
De acuerdo con el ente regulador, sobre la restricción de alimentos a los cines, ha asegurado que tales restricciones a los usuarios podrían constituir cláusulas abusivas. Otorgándole un plazo de dos días hábiles para que informe las acciones que adoptaría al respecto.
Es preciso destacar que desde 2018 solamente en Cinemark y Cineplanet está permitido el consumo de alimentos comprados en otras tiendas. Siempre y cuando estos sean similares a los que venden estas empresas: canchita, gaseosas, agua de mesa y nachos; por ejemplo. Una solución alternativa es la compra de cupones de entrada y combo con descuentos, como los que trae Cuponidad.
“Denunciamos solo a dos cadenas: Cinemark y Cineplanet para que permitan ingresar alimentos similares a los que expenden estos cines. No es que se pueda ingresar con un plato de carapulcra o ceviche. Ambas empresas llevaron al Poder Judicial estas demandas para que se deje sin efecto la resolución del Indecopi pero hasta la fecha seguimos litigando». Aseguró el presidente de la Asociación Peruana de Consumidores y Usuarios (Aspec), Crisólogo Cáceres.
Ante este escenario, Cáceres ha exhortado al Indecopi a actuar de oficio con el caso de Cinépolis, así como en otras cadenas de cine que se encuentran en el mercado peruano, para equilibrar la balanza y que las normas se apliquen para todos.
Indecopi, ente regulador, anunció que realizaría un monitoreo, ya que algunos cines estarían incurriendo en una infracción al impedir el acceso de alimentos a los usuarios.
Multas para los cines que prohíben el ingreso de alimentos
Para los usuarios que van a una sala de cine con sus propios alimentos y que no se les permite el ingreso, Jaime Delgado, abogado especialista en derechos del consumidor y fundador de Aspec, recomienda que los usuarios soliciten el Libro de Reclamaciones.
“Lo que deberían hacer de inmediato es usar el Libro de Reclamaciones. Invoco a los jóvenes, sobre todo, a que si en algún cine les impiden el ingreso tomen fotografías y las compartan en las redes sociales. Ya la infracción está comprobada, yo he presentado las pruebas documentadas a Indecopi de qué están haciendo estos cines como Cinépolis y CineStar,” señaló Delgado para el Diario La República.
Se debe tener en cuenta que el Código de Protección al Consumidor establece que son nulas las cláusulas abusivas, así el Indecopi y el Poder Judicial han determinado que si el establecimiento pone una cláusula de contratación que dice “prohibido el ingreso de alimentos, salvo que me compres a mí” ya las autoridades han resultado que es una medida abusiva e ilegal, explicó Delgado.
El abogado recordó que en estos casos las empresas se podrían enfrentar a multas hasta por S/2 millones 070.000 (450 UIT).
¿Cuáles son los alimentos permitidos en el cine?
Sin embargo, no se puede llevar cualquier tipo de alimento cuando se desea ver una película en el cine. Al respecto, Delgado explica que la resolución de Indecopi es clara, solo pueden ingresar alimentos similares a los que el cine ofrece. “No puedes llevar tu arroz con pollo, salvo que el propio cine empiece a venderlos también”, resaltó.
Finalmente el especialista recordó que las empresas argumentaban que más del 30% de sus ingresos eran provenientes de sus propias ventas de alimentos. Sin embargo, se trata de una situación que pocos les afecta dado que, según el letrado, la mayoría de los usuarios prefieren consumir en el cine debido a su practicidad y conveniencia.