Una empresa centrada en el logotipo no cruza la barrera de la indiferencia comercial, es necesario apoyarse de la identidad visual para crear una gran experiencia
Quienes entienden el poder de lo visual en el retail, saben que una marca necesita más que un logo para iniciarse en el mundo de los negocios. Aunque este, sin duda, es el primer elemento de contacto con el cliente, no es suficiente para mostrar la identidad de una empresa.
En la era en la que todas las marcas utilizan la estrategia omnicanal, una empresa centrada en su logotipo no es más que un grano de arena en el desierto.
En cambio, aquellos que gozan de una identidad visual sólida, tendrán un lenguaje propio para hablarle al mundo de forma única y especial.
Identidad visual para ganar
Para gozar de una identidad de marca poderosa, es conveniente aceptar que existen muchos elementos que van más allá de los logotipos y que todos actúan en conjunto para crear mensajes que ayuden al cliente a hacer asociaciones positivas para el negocio.
Dichos elementos se dividen en tres categorías: Elementos primarios, gráfica secundaria y sistema de marca, que juntos proyectan la verdadera esencia de una empresa.
Los elementos primarios, a su vez, están compuestos por: logotipo, colores primarios y key visual.
Entre ellos destaca el color, pues tiene la capacidad de transmitir determinadas sensaciones, despertar emociones, añadir o disminuir desempeño a un producto, además constituye una herramienta infalible para permanecer en la mente del consumidor.
Gracias a su potencial, el público puede dar referencias como “rojo coca-cola” o “azul Nivea”.
Sin embargo, más allá del logotipo y los colores primarios, conviene tener muy presente el key visual, conocido como diseño base, el cual sirve como marco referencial para abordar una campaña.
Él establece de forma clara el tono de comunicación, el significado y las emociones a despertar en el consumidor, a través de la unión de elementos visuales y verbales que se convierten en una guia para crear experiencias a través de la publicidad.
El uso del key visual, también ayuda a que la marca no cometa errores al momento de realizar una campaña, y se aproxime a lograr un posicionamiento más consistente.
Secundario, pero no menos importante
Por otro lado, están los elementos que componen la gráfica secundaria, usados en menor medida y en diferentes puntos de contacto de la marca: el estilo fotográfico, iconográfico, patrones e ilustraciones.
Estos elementos aportan consistencia y riqueza a la personalidad de la marca, refuerzan conceptos y permiten transmitir una identidad visual sólida, coherente en cualquier punto donde sea necesario comunicar.
- Tipografía: ayuda y construye las percepciones que enriquecen y completan los significados de la marca.
- Estilo fotográfico: elemento original y diferencial para transmitir el carácter de marca y proyectar un estilo de vida.
- Iconos, patrones y demás elementos visuales: permiten disponer de recursos que luego pueden ser utilizados para reforzar la comunicación de la marca.

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Por último, el sistema de marca
En el sistema de marca o layout, confluyen elementos de identidad como logos, tipografías, colores, patrones y estilo fotográfico y cualquier otro recurso visual que se haya estipulado durante la construcción de la marca.
Funciona como un identificador verbal y visual que ayuda a crear un patrón de reconocimiento para las marcas, favoreciendo a que se expresen con consistencia y de forma diferencial.
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