Por ejemplo, en el caso de Sweet Anita, una streamer británica que sufre del un trastorno del sistema nervioso y dice malas palabras de forma involuntaria. Te lo contamos aquí.
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El lenguaje procaz, obsceno o sexualmente explícito está prohibido en Twitch y en casi todas las plataformas sociales, no obstante, el estándar no es el mismo cuando se trata de creadores de contenido con síndrome de Tourette. El caso más emblemático es el de la británica Sweet Anita.
El síndrome de Tourette es un trastorno del sistema nervioso que hace que las personas produzcan movimientos y sonidos repetidos (también conocidos como tics motores y vocales), que no pueden controlar. Puede mostrarse como parpadeo constante, encogimiento de hombros o uso intempestivo de palabras ofensivas.
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Quienes son cinéfilos pueden ubicar algunos retratos de este síndrome en películas como la hollywoodense Hijos de Brooklyn, con Edward Norton; o en la española Tic-Toc, en el personaje del argentino Oscar Martínez.
Y en Twitch pasa con Sweet Anita, una streamer de británica de 31 años que comenzó su canal transmitiendo gameplays y hablando de videojuegos aunque ya ha ampliado su repertorio y ahora habla de su vida, de animales, de feminismo, entre otros tópicos. Su discurso está lleno de repentinas palabras obscenas, pero las mismas están permitidas por la plataforma y no son penalizadas debido a la patología de la influencer. ¿Es un desafío a la inclusividad? Quizá.
“Puta lasaña”, “me follaré a tus amigos”, “¿me puedo correr en tu galleta?”, son algunas de las frases que a veces se le escapan a Sweet Anita, que es tan exitosa que el propio Twitch, lejos de censurarla, firmó con ella un contrato de colaboración en 2018 que le daba más opciones de monetización.
Su ascenso a la fama en Internet fue veloz. Y por un tiempo, muchos (incluídos ella misma) pensaban que la vetarían en las plataformas por romper las reglas, pero eso no sucedió. Sin embargo, su síndrome plantea un debate sobre los límites de la inclusividad. ¿Está bien permitir lo prohibido cuando es involuntario o producto de una condición de salud? Las opiniones son diversas.
«A medida que la gente comprende más mi condición, el mundo se vuelve un poco más seguro para gente como yo», dice Sweet Anita defendiendo su participación en Twitch.
La plataforma, por su parte, ha declarado: «Queremos crear un ambiente acogedor que establezca un nivel de decencia y respeto por la comunidad», y han explicado que están “encantados de apoyar a streamers como ella a medida que hacen crecer sus carreras». ¿Qué opinas tú?