Como parte de la iniciativa, el restaurante de comida rápida ha colocado vallas publicitarias de colores amarillo y rojo en Utrecht y Leiden, impregnadas con el irresistible olor de sus productos.
En entornos cotidianos como ascensores, metros o salas de conferencias, a menudo uno encuentra un olor familiar: el de McDonald’s. Aunque no se vea, su presencia es inconfundible, similar al logotipo. Por eso, McDonald’s Países Bajos ha aprovechado su olor característico en su última campaña publicitaria.
Durante décadas, McDonald’s ha deleitado el paladar de personas en todo el mundo, convirtiéndose en una de las marcas más queridas y reconocibles. Sin embargo, la marca se dio cuenta de que hay algo tan memorable para los consumidores como sus arcos dorados, sus productos o su olor.
McDonald’s Holanda puso esto a prueba. En Utrecht y Leiden, se instalaron una serie de vallas publicitarias de color amarillo y rojo. A primera vista, las impresiones parecen estar vacías, pero cuando los transeúntes se acercan a unos 5 metros, son recibidos con el distintivo aroma de las papas fritas de McDonald’s, emanando desde el interior del cartel. Esta es la primera vez que se utiliza un cartel para difundir el aroma de McDonald’s, convirtiendo el olor reconocible en su activo de marca más importante.
«McDonald’s se trata de buenos momentos. Somos conocidos por los activos distintivos de nuestra marca, que son principalmente visuales. Se ha demostrado que el olfato es más eficaz para generar recuerdos claros y emocionales que las imágenes. Con la inclusión de este sentido en nuestra publicidad, encontramos una nueva forma de recordarle a la gente los buenos momentos en McDonald’s«, señaló Stijn Mentrop-Huliselan, CMO de McDonald’s Países Bajos.
Las vallas se colocaron estratégicamente a 200 metros de los restaurantes McDonald’s, invitando a aquellos con antojos a pasar fácilmente y pedir sus productos favoritos.
Fuente: Mc Donalds Países Bajos