Pocos meses de después de presentar su primera línea de ropa deportiva para embarazadas, la marca sigue en el esfuerzo de ampliar su nicho valiéndose del femvertising.
El femvertising se ha instituido como una de las tendencias en boga en el marketing a nivel global en los últimos años. Pone el foco en el empoderamiento femenino, y busca vender a partir de esa mirada, ofreciendo a las mujeres productos, servicios y mensajes simbólicos que van a tono con los nuevos tiempos y las nuevas nociones sobre los roles de género. Además, rompiendo tabús.
Una marca que se ha valido de ese capital simbólico es Nike, buscando ampliar su nicho apuntando a las mujeres, al mismo tiempo que intenta deslastrar a sus productos de los clichés que por generaciones han estado asociados a la práctica deportiva.
Con sus acciones de femvertisig, Nike no solo busca acercar a las mujeres, sino también mostrar que el deporte, y por tanto sus productos, no son solo para los futbolistas de grandes equipos o para los hombres musculosos que levantan pesas de decenas de kilos. Sino para todas las personas que quieran tener una vida saludable, y más allá, que quieran escuchar a su cuerpo en cuanto a los que realmente necesita.
Por ese camino va el nuevo Cycle Syncing Training, un nuevo sistema de entrenamiento del Nike Training Club que se sincroniza con el ciclo menstrual, para aportar a quien lo usa un servicio personalizado que saque el mayor partido de cada momento hormonal.
El lanzamiento de este nuevo programa va acompañado de una campaña promocional a cargo de la agencia británica RGA London y su imagen se anota en otra tendencia: la del body positive.
La página web de Nike dice que este programa de entrenamiento puede responder a las preguntas de muchas mujeres que no entienden por qué tienen variaciones de fuerza y energía muy evidentes entre una semana y otra.
«El lugar en el que se encuentre en su ciclo menstrual podría tener algo que ver con eso. Como dice Stacy Sims, PhD, experta líder mundial en fisiología de la atleta femenina: es tu fisiología, no tu estado físico. Aprender a entrenar para adaptarse a su ciclo puede ayudarlo a manejar el estrés, aumentar la inmunidad, comprender su metabolismo y mejorar su rendimiento, lo que lo hará sentir más en forma, más fuerte y más rápido».
El entrenamiento tiene tres fases y para realizarlo se debe comenzar desde el día 1 del periodo menstrual. Los detalles y las formas para incorporarse están en la página web de la marca, que afirma que este entrenamiento puede tener beneficios adicionales como manejar el estrés y controlar los malestares asociados a la menstruación.