El mercado del coleccionismo de videojuegos está en auge y mueve cifras millonarias. Acá te contamos los detalles de esta transacción histórica.
Si leyó la nota que publicamos ayer sobre el récord de 870.000 dólares alcanzado por una copia rara y antigua de The Legend of Zelda, entonces no le sorprenderá conocer sobre este último acontecimiento en el mundo del coleccionismo y las subastas de videojuegos.
El récord le duró muy poco al juego dedicado al reino de Hyrule. Pocas horas después una copia también particular de Mario 64 rompió un nuevo techo, de hecho doblando la valoración y llegando a 1,65 millones de dólares. ¿Inverosímil, no?
Para los coleccionistas, esta copia en particular de Mario 64, con más de 25 años de fabricada, resultó ser todo un hallazgo, y no solo porque es uno de los videojuegos más populares de la historia. Heritage Auctions lo llamó la «copia con la calificación más alta» del juego hasta la fecha, con una calificación profesional de Wata 9.8 A Sealed.
«El significado cultural de este título y su importancia para la historia de los videojuegos es primordial, y la condición de esta copia es tan impresionante que realmente estamos embelesados», dice la descripción.
En abril, una copia sellada de Super Mario Bros se vendió por 660.000 dólares, que era lo máximo que alguien había pagado por un juego hasta ese momento. Eso no es todo. Si miramos hacia atrás, en noviembre de 2020 una copia de Super Mario Bros 3 se vendió por 156.000 dólares.
Queda por ver cuánto tiempo durará este nuevo récord, pero por ahora Super Mario 64 es la compra de videojuegos más cara de la historia.