Este hecho se presenta luego de una serie de transacciones de warrants acciones que se vieron afectadas en un intento de Elon Musk de privatizar la compañía
La empresa financiera JPMorgan demandó a la fabricante Tesla por US$162 millones por una serie de transacciones de warrants de acciones, afectadas por el intento de Elon Musk de privatizar el fabricante de automóviles hace tres años.
El mayor banco de EEUU compró los warrants de Tesla en 2014 para ayudar al fabricante a reducir el riesgos de que sus acciones se diluyeran con la emisión de notas convertibles y para hacer ciertas deducciones del impuesto sobre la renta federal.
Según la demanda presentada el lunes 15 de noviembre ante el tribunal federal de Manhattan, al momento en que expiraran los warrants, Tesla le tenía que hacer a JPMorgan un pago de acciones o efectivo si sus acciones cotizaban por encima de un determinado precio de ejercicio.
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Según Bloomberg en Línea, JPMorgan había afirmado que tenía la discreción de ajustar el precio de ejercicio en función de factores que incluyen la volatilidad de las acciones de Tesla. El banco hizo dos modificaciones en agosto de 2018: una después de que Musk tuiteó que había asegurado fondos para privatizar Tesla y otra cuando el director ejecutivo abandonó el esfuerzo semanas después.
“A pesar de que los ajustes de JPMorgan fueron apropiados y requeridos contractualmente, Tesla se ha negado a liquidar el precio de ejercicio contractual y pagar la totalidad de lo que le debe a JPMorgan”, dijo el banco en la denuncia.
Tesla escribió a JPMorgan en febrero de 2019 para argumentar que los ajustes que hizo el banco seis meses antes fueron “irrazonablemente rápidos y representaron un intento oportunista de aprovechar los cambios en la volatilidad de las acciones de Tesla”, según la denuncia.
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No obstante, JPMorgan aseveró que la empresa de Musk no hizo señalamientos o aseveraciones específicas a sus cálculos y que mucho menos respaldó su afirmación, y no ha objetado nada más en los últimos dos años.
La disputa saca a relucir uno de los episodios más controvertidos de Musk. La Comisión de Bolsa y Valores de EE.UU. (SEC, por sus siglas en inglés) demandó al CEO y a Tesla en septiembre de 2018, alegando que Musk había cometido fraude de valores y que la compañía carecía de controles adecuados de su actividad en las redes sociales.