Varios vecinos han mostrado su descontento argumentando que las patinetas son abandonadas en veredas y pistas, obstaculizando el libre tránsito y causando un gasto extra de recursos en el serenazgo.
Desde hace una semana, Movo (aliado con Cabify) y Grin (en alianza con Rappi) vienen alquilando el servicio de scooters eléctricos en los distritos de San Isidro y Miraflores. Ambas empresas acaban de llegar a Lima y vienen expandiendo su oferta por varias ciudades de Latinoamérica desde el 2018.
El negocio consiste en alquilar vehículos de movilidad personal (VMP, por sus siglas en inglés) a usuarios que se trasladan por distancias cortas. Por cada minuto de viaje, Grin cobra S/0,60 y Movo S/0,50.
Sin embargo, a través de las diferentes redes sociales, vecinos de ambos distritos han señalado su descontento porque las patinetas son abandonadas en pistas y veredas, obstaculizando el libre tránsito de peatones y vehículos.
En las fotos difundidas en diversas redes, también se aprecia a personal de serenazgo de San Isidro utilizando vehículos de fiscalización para recoger los scooters, lo cual ha sido cuestionado por los vecinos quienes manifiestan su disconformidad por el uso de recursos de los contribuyentes para solucionar el desorden generado por el sistema de patinetas.

No hay regulación
Según el Ministerio de Transportes y Comunicaciones, en el Perú no hay regulación vigente para el uso de VMP (scooters eléctricos, skates eléctricos o segways). “La Dirección de Políticas y Normas en Transporte Vial viene analizando la regulación de las formas y modos de uso que deben tener los VMP. Es importante establecer cómo y por dónde deberían circular, considerando las velocidades y dimensiones que presentan. En otros países, ya se encuentran regulados y se alquilan solo a mayores de edad”, explicó el MTC.
Al respecto, Kevin Cornejo, representante del Instituto para la Protección del Medio Ambiente – VIDA, asegura que una iniciativa de transporte sostenible como es el del scooter electico está en el ojo de la tormenta por la implementación de un pésimo sistema por partes de las autoridades, en especial el de la municipalidad de San Isidro.

“El sistema planteado solamente beneficia a una empresa que alquila scooters y perjudica a los ciudadanos que se ven afectados por todo este caos, en el cual hasta se están comprometiendo recursos de todos los contribuyentes para trata de ordenarlo”, agregó el experto en movilidad sostenible.
Las municipalidades de San Isidro y Miraflores vienen analizando la implementación de ordenanzas que ayuden a ordenar el nuevo modelo de negocio.