La propuesta, creada por la agencia BETC Paris, juega con las ilusiones ópticas para darle vida al lema característico de la marca.
Cuando pensamos en un producto como Vanish, se nos vienen a la mente aspectos como su packaging, su función, pero sobre todo su famoso lema «Con Vanish, las manchas desaparecen». Esto último, es a lo que la marca le ha querido dar vida en su última e ingeniosa campaña.
Para ello, Vanish se ha valido de las ilusiones ópticas – representaciones que engañan la vista y hacen que el cerebro perciba la realidad de forma distorsionada – , creando paneles que muestran varias manchas alrededor de su logo, las cuales desaparecen si se centra la mirada solo en el símbolo de la marca.
Esta peculiar estrategia no es otra pieza publicitaria más, sino es una invitación a mirar y concentrarnos en el logotipo de Vanish, colocado en el centro de una multitud de manchas feas. ¿Resultado del experimento? Con solo mirar el logo por unos segundos, desaparecen mágicamente.
Cabe resaltar que esta campaña visual también consta de una serie de fotografías, donde se muestran modelos posando prendas que tienen un diseño de este fenómeno llamado el efecto Troxler, que hace que los objetos que están lejos del punto en el que se fija la vista desaparezcan.
En ese sentido, la marca aprovechó la oportunidad para lanzar “The Magic Drop» : una colección cápsula compuesta por 2 piezas, una sudadera con capucha y una camiseta.
La campaña está disponible desde el 8 de abril en redes sociales y se desplegará a través de un sistema de display de hiperafinidad con diversos visuales ubicados estratégicamente en múltiples lavanderías.
Una propuesta de este tipo, demuestra la capacidad de la marca por repensar su enfoque publicitario, que está caracterizado por marcas del rubro con los típicos anuncios limitados a pruebas de producto ficticias.