El Cabildo Catedral de Málaga expresó su rechazo contundente hacia la utilización irrespetuosa de imágenes devocionales y lugares sagrados con fines comerciales.
El mundo de la publicidad es un terreno lleno de sensibilidades y percepciones. En su afán por cautivar, entretener y conectar con el público, también puede ser una fuente de discordia cuando se adentra en terrenos delicados. La reciente controversia en torno a Zara y su vídeo durante la Semana Santa de Málaga, España, ha desatado un debate sobre los límites de la creatividad publicitaria y el respeto a las creencias religiosas.
anuncio de Zara en Málaga con imágenes de la Catedral la iglesia de San Pedro, la Virgen de los Dolores , la Expiración #SemanaSantaMálaga pic.twitter.com/zRmBvgSCo7
— Juan Rosal Blanco (@rosal_blanco) April 8, 2024
El vídeo muestra modelos luciendo prendas de Zara en el marco de la Semana Santa en Málaga. Sin embargo, lo que ha causado revuelo no es la moda en sí, sino el contexto en el que se presenta. Varios segmentos del vídeo muestran a los modelos dentro de templos religiosos, incluyendo la Catedral de Málaga y la iglesia de San Pedro. Estas escenas, acompañadas por la canción «Demasiadas mujeres» de C. Tangana, han sido percibidas como una falta de respeto hacia las tradiciones y creencias de la comunidad religiosa local.
Reacciones y repercusiones legales
Las críticas no se hicieron esperar. El Cabildo Catedral de Málaga expresó su rechazo contundente hacia la utilización irrespetuosa de imágenes devocionales y lugares sagrados con fines comerciales. Además, anunció la posibilidad de emprender acciones legales contra aquellos responsables de obtener las imágenes sin autorización.
Comunicado del Cabildo Catedral pic.twitter.com/NlzYXV4zV9
— Diócesis de Málaga (@DiocesisMalaga) April 7, 2024
“En ningún momento se ha autorizado la grabación de imágenes con este fin. […] Sospechamos que las imágenes se han obtenido aprovechando los momentos de la visita turística, burlando la vigilancia interna y actuando de un modo doloso”, sostuvo a través de un comunicado.
Esta postura fue respaldada por la Archicofradía Sacramental de Culto y Procesión del Santísimo Cristo de la Expiración y María Santísima de los Dolores Coronada, que también se desvinculó del vídeo y reafirmó su posición contraria a su contenido.
— Expiración Málaga (@ExpiracionMlg) April 7, 2024
El origen del vídeo y el concurso interno de Zara
Es importante señalar que el vídeo en cuestión no fue una producción oficial de Zara, sino que formó parte de un concurso interno conocido como «Fashion Week», organizado entre los empleados de la marca. Cada tienda de Zara participa en este concurso con su propio vídeo, y el polémico clip lleva la firma de los dependientes de la tienda de Zara en la calle Liborio García de Málaga. Aunque inicialmente se publicó en una cuenta de Instagram gestionada por empleados de la marca, fue retirado debido a la avalancha de críticas recibidas.
La controversia en torno al vídeo de Zara pone de manifiesto la importancia de la sensibilidad cultural y religiosa en el ámbito publicitario. Si bien la creatividad es un valor fundamental en la publicidad, esta debe ejercerse con responsabilidad y respeto hacia las diferentes comunidades y sus creencias.